Mis primeros pasos

Aún recuerdo con cariño aquel día. Mi vicio de por aquel entonces era el Super Smash Bros Melee de la cube, y de vez en cuando iba a casa de Miguel a jugarlo. Unos piques fantásticos.

Sin embargo, al entrar ese viernes, vi a Dani sentado frente al ordenador. Miguel estaba detrás de él y los dos atendían a la pantalla. Dani acaba de llegar de Sevilla y traís una novedad: una extraña serie anime en la que los personajes, en vez de liarse a palos, se sentaban frente a un tablero y jugaban un extraño juego de circulitos blancos y negros. Siendo sincero, en aquel momento no me llamó demasiado la atención, y tras preguntar que era aquello convencí a Miguel para que nos fueramos a jugar a la Cube a su cuarto.

Sin embargo, Dani (Shuusaku te bendiga), entró un rato después en el cuarto. "Tendríais que aprender a jugar al Go. Es bastante interesante". Dani había aprendido en el salón manga de Jerez de 2007. No recuerdo exactamente la fecha de aquel viernes, solo que faltaba poco para que tuviermos las vacaciones. La cosa es que Dani nos enseñó lo rudimentario con un tablerito y fichas de cartón. Tras un par de partidas, el juego me tenía absorbido. Miguel siempre me ganaba en esas partidas (él podía jugar en casa con Dani, el cual le ganaba siempre) lo cual hacía que yo me picara más aún. Más tarde empecé a ver la serie (bravo por los autores/dibujantes/guinistas etc de Hikaru no Go, un fuerte aplauso para ellos porque esa serie es oro puro) y Miguel hizo un tablero de madera y de piedras usabamos monedas de 10 y 5 cts.

Mi primer contacto con AGOCA (sin contar a Dani, claro) fué en verano. Creo que nunca me voy a olvidar de aquel día. El hermano de Miguel nos había comentado que había un club de Go en Cádiz, del que él había aprendido, y tanto Miguel como yo estabamos deseosos de ir. Un jueves se organizó en Cádiz una quedada de un foro al que pertenecíamos, y aprovechando que no teníamos nada planeado para por la tarde, decídimos ir con toda la peña a conocer por fin el club. vaya tarde que escogimos xD Al llegar al gimnasio de la casa de la juventud, el club se encontraba... ¡¡lijando tableros!! Con el paso del tiempo advertí que esta era una práctica típica del grupo. Nos pusieron a lijar y un aún desconocido Juan explicó a nuestros amigos como se jugaba. He de decir que no he disfrutado más en ningún otro sitio lijando. kenshin, Dani, Rosa, Pablo, Arturo, Albertillo... todos lijando.

Tras eso fuimos algunas veces más al club, ya sin los amigos del foro. Poco a poco aprendíamos. Sin embargo, fué en el Salón de Cádiz, en Octubre de 2007, cuando de verdad me enganché. Aparte de ver a tanta gente jugar, y de jugar con tantos... conocí a cierta persona. Jesús Portillo, potitogo para los colegas. Él, venido de Sevilla y cosplayeado de Marco, de Metal Slug, jugó conmigo. Me quedé maravillado: ¡¡hay gente de por ahí que juega!! Y empecé a viciarme en serio.

Mis asistencias a las reuniones de la Agoca fueron cada vez mayores, hasta que fuí todos los lunes y jueves. Recuerdo con simpatía y diversión mis partidas con JJ (¡¡es el mejor sensei!!), Wargo (¡oh dios mio! ¿Y ese moyo?), Eloy (dios como me diste de palos), Pablo (¡¡noooooooo otra serpiente no por dios!!), Kenshin (bim,bam,crash! wopz,¿eso era tu moyo? Pues ha petado ^^)... Pese a que me daban todos de palos (hasta Albertillo! Aún recuerdo la partida en el goban xD) eso no me desanimaba. Al contrario, era muy estimulante. "He de ganar. Ganaré. Si me esfuerzo, ¡¡acabaré ganando!!" Y la cosa fue dando frutos... pero eso ya es otra historia.

En cualquier caso, lo que ahora quiero es dar las gracias a todas esas figuras que me impulsaron a jugar este magnífico juego. Agoca, sois la caña, todos vosotros. ¡¡Muchas gracias por mostrarme este fantástico mundo que es el Go!!

Un saludo: Lobuno